La banda de música norteamerica está pasando por un momento crucial en su carrera y es que según han informado ellos mismos en Twitter tienen problemas internos que no logran solucionar y está tensando su relación. Este hecho ha llevado a suspender sus últimos dos conciertos. El pasado 29 de Julio actuaban en Dallas y poco después de empezar el concierto el vocalista Caleb Followill abandonó el escenario escusandose por problemas con su voz:
«Voy a ir al backstage un segundo. Voy a vomitar, beberé una cerveza… Y que conste que no estoy borracho, pero me voy a caer aquí mismo por culpa de este maldito calor… Volveré aquí y tocaremos 3 canciones más»
Dejando a todo el mundo sin concierto y mostrando una grandisima falta de profesionalidad con sus fans, quienes pagan por verles actuar.
Tras el suceso su hermano Nathan se disculpó a sus seguidores en Twitter:
«Quiero mucho a nuestros fans. Se que no sois estúpidos y no puedo mentiros. Hay problemas en nuestra banda más grandes que no haber bebido suficiente Gatorade».
¿Serán los problemas tan grandes que no habrá salvación para Kings of Leon?